Roma
Roma respira historia. Toda la ciudad es un museo que cautiva y deslumbra a cada paso. Las antiguas esculturas barrocas de la galería Borghese, las vistas desde el Campidoglio, las catacumbas y los tesoros del Vaticano son algunas de sus atracciones más visitadas.
Sin embargo, existe una Roma relativamente desconocida para el turista. A 25km al suroeste de la capital, la ciudad portuaria de Ostia era punto de referencia para pescadores, marineros y esclavos.
Los restos de las edificaciones que datan del siglo V a.C, incluyen la entrada a la ciudad, las Termas de Neptuno y el teatro, entre otros. Como contracara a esta visión del mundo plebeyo, una visita a Tivoli brinda una visión de los placeres y divertimentos que los "ricos y famosos" han disfrutado desde tiempos inmemoriales.
A corta distancia de la capital existen múltiples puntos arqueológicos relacionados con la cultura etrusca; uno de ellos es la ciudad de Tarquinia, cuna de los reyes tarquinos, quienes dominaron Roma antes de la República; el paseo se completa con una visita al Museo Etrusco en la Villa Borghese.
Roma respira historia. Toda la ciudad es un museo que cautiva y deslumbra a cada paso. Las antiguas esculturas barrocas de la galería Borghese, las vistas desde el Campidoglio, las catacumbas y los tesoros del Vaticano son algunas de sus atracciones más visitadas.
Sin embargo, existe una Roma relativamente desconocida para el turista. A 25km al suroeste de la capital, la ciudad portuaria de Ostia era punto de referencia para pescadores, marineros y esclavos.
Los restos de las edificaciones que datan del siglo V a.C, incluyen la entrada a la ciudad, las Termas de Neptuno y el teatro, entre otros. Como contracara a esta visión del mundo plebeyo, una visita a Tivoli brinda una visión de los placeres y divertimentos que los "ricos y famosos" han disfrutado desde tiempos inmemoriales.
A corta distancia de la capital existen múltiples puntos arqueológicos relacionados con la cultura etrusca; uno de ellos es la ciudad de Tarquinia, cuna de los reyes tarquinos, quienes dominaron Roma antes de la República; el paseo se completa con una visita al Museo Etrusco en la Villa Borghese.