Londres. Nos preparamos para una caminata y window shopping por Regent Street, Bond Street e inmediaciones londinenses. Ante nuestros asombrados ojos: un completo juego de valijas, astronómicamente caras, en cocodrilo azul, llamadas más para adornar un living que para despacharlas en un aeropuerto, esperando que lleguen intactas a destino.
Tomamos Saville Road, reducto de los grandes sastres; en realidad, para su fama, una deslucida calle que contrasta con la calidad de la ropa que exhibe. La boutique de British Airways está equipada con todo lo que precisa un viajero: libros, guías turísticas y planos. El primer piso lo comparten una moderna cafetería y el mostrador de venta de viajes.
La Casa Central de Sotheby's es otro bastión del Imperio, donde afluye arte de todo el mundo para ser subastado con la tradicional flema británica y la última tecnología.
La galería Burlington Arcade nos lleva a Piccadilly Circus.
Cruzamos Piccadilly directamente a Fortunm & Masón para tomar un delicioso high-tea, y en trascendente meditación deducimos que los ingleses se han dedicado tanto a los desayunos, tés y meriendas que se olvidaron de elaborar almuerzos y cenas. Es hora de descansar, nos espera la noche parisina.
Tomamos Saville Road, reducto de los grandes sastres; en realidad, para su fama, una deslucida calle que contrasta con la calidad de la ropa que exhibe. La boutique de British Airways está equipada con todo lo que precisa un viajero: libros, guías turísticas y planos. El primer piso lo comparten una moderna cafetería y el mostrador de venta de viajes.
La Casa Central de Sotheby's es otro bastión del Imperio, donde afluye arte de todo el mundo para ser subastado con la tradicional flema británica y la última tecnología.
La galería Burlington Arcade nos lleva a Piccadilly Circus.
Cruzamos Piccadilly directamente a Fortunm & Masón para tomar un delicioso high-tea, y en trascendente meditación deducimos que los ingleses se han dedicado tanto a los desayunos, tés y meriendas que se olvidaron de elaborar almuerzos y cenas. Es hora de descansar, nos espera la noche parisina.