Muchas cosas cambiaron en Miami, pero no Coral Gables, el distrito de arquitectura mediterránea que tuvo su auge en los años 20. En los amplios bulevares con nombres españoles, hasta la más corriente de sus tiendas luce un look diferente. Para comprobarlo, basta con entrar a una de las tantas wine stores, de donde saldrá después de catar una buena cepa acompañada de un excelente queso.
Al sur del Downtown y desplegado a lo largo de la Bahía Biscayne, la zona de Coconut Grove se convirtió en uno de los barrios más de moda, con restaurantes internacionales y las mejores casas de ropa.
El punto de reunión es el Coco Walk, un shopping con un estilo arquitectónico muy particular, que concentra propuestas de entretenimiento y compras. The Gap, Banana Republic y Planet Hollywood son parte del muestrario. No deje el maü sin haber probado las tapas españolas del Café Tu Tu Tango -¿tango y comida española?- en el agradable ambiente de este restaurante decorado como loft.
Cocktail Pastel
En clave de colores pasteles y luces de neón, los hoteles y restaurantes más clásicos recuperaron un pasado de gloria. Gran parte del "lifting" al que fue sometida esta ciudad pasó por las paredes de sus descascarados edificios Art Déco. La mejor forma de tener un panorama genérico de algunos de los hitos de esta arquitectura es tomar el Art Déco VJalking loar. El grupo parte del Art Déco Welcome Center, ubicado en el 1001 de la Ocean Drive, y cuesta US$10 por persona.
Las siluetas despiertan los más fantásticos conjuros de la imaginación: una construcción en forma de tetera, otra parecida a un barco, la fachada en tonos ámbar y crema del hotel Beacon, el estilo náutico del Park Central o el aire veneciano de los Locus Apartments.
Figuras geométricas, contornos graciosos, palmeras, flores y flamencos distinguen este estilo tropical que, en los hoteles de Miami, creó su propia versión caracterizada por interminables terrazas cubiertas y fabulosos restaurantes.
Al terminar el día, volver a South Beach para admirar cómo la puesta de sol tiñe los edificios de dorado, entremezclándose con los colores estridentes de las primeras luces de neón, es el preludio ideal para una noche de diversión.
Al sur del Downtown y desplegado a lo largo de la Bahía Biscayne, la zona de Coconut Grove se convirtió en uno de los barrios más de moda, con restaurantes internacionales y las mejores casas de ropa.
El punto de reunión es el Coco Walk, un shopping con un estilo arquitectónico muy particular, que concentra propuestas de entretenimiento y compras. The Gap, Banana Republic y Planet Hollywood son parte del muestrario. No deje el maü sin haber probado las tapas españolas del Café Tu Tu Tango -¿tango y comida española?- en el agradable ambiente de este restaurante decorado como loft.
Cocktail Pastel
En clave de colores pasteles y luces de neón, los hoteles y restaurantes más clásicos recuperaron un pasado de gloria. Gran parte del "lifting" al que fue sometida esta ciudad pasó por las paredes de sus descascarados edificios Art Déco. La mejor forma de tener un panorama genérico de algunos de los hitos de esta arquitectura es tomar el Art Déco VJalking loar. El grupo parte del Art Déco Welcome Center, ubicado en el 1001 de la Ocean Drive, y cuesta US$10 por persona.
Las siluetas despiertan los más fantásticos conjuros de la imaginación: una construcción en forma de tetera, otra parecida a un barco, la fachada en tonos ámbar y crema del hotel Beacon, el estilo náutico del Park Central o el aire veneciano de los Locus Apartments.
Figuras geométricas, contornos graciosos, palmeras, flores y flamencos distinguen este estilo tropical que, en los hoteles de Miami, creó su propia versión caracterizada por interminables terrazas cubiertas y fabulosos restaurantes.
Al terminar el día, volver a South Beach para admirar cómo la puesta de sol tiñe los edificios de dorado, entremezclándose con los colores estridentes de las primeras luces de neón, es el preludio ideal para una noche de diversión.