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Viena
Los reyes del vals, Johann Strauss padre e hijo, capturaron el espíritu romántico y a la vez formal de la sociedad vienesa de principios del siglo XIX. Una vez por año, la música de Johann Strauss constituye la base de la temporada de bailes de gala.

Los bailes y la Ópera de Viena
Los bailes más glamorosos se realizan en antiguos e históricos palacios, museos y teatros. En 1854, el joven emperador Francisco Iosé decretó que la nueva Ópera sería utilizada para las representaciones de ópera, ballet y celebraciones de bailes.

Algunos años después de su inauguración, Franz Von Jauner, director de la Ópera organiza el primer baile que se convertiría en una institución nacional: el baile de la Ópera Estatal de Viena.

Al día de hoy, la gala tiene lugar una vez al año en el mes de febrero y es motivo de interrupción del calendario de la temporada de Ópera.

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Viena
La mundialmente famosa Ópera de Viena y otras grandiosas salas de conciertos constituyen una escenografía ideal para la única ciudad que puede preciarse de tener música propia: los valses vieneses,
Viena fue la cuna del rey del vals: Johann Strauss. Pero Strauss fue un inspirado músico en una cadena de compositores como Haydn, Mozart, Beethoven, Schubert, Mahler y Schonberg, quienes también trabajaron en ella. El vals se popularizó como baile entre la burguesía viene-sa de los suburbios y resultó, en un primer momento, escandaloso para la aristocracia debido a la cercanía de las parejas.

Viena

Viena
Existe una ciudad que puede reclamar para sí el título de capital mundial de la música, esa es Viena, Allí Mozart y Haydn revelaron el balance mágico del clasicismo, Beethoven lo transmutó en romanticismo, Schubert inventó el lied, Brahms, Bruckner y Mahler llevaron la sinfonía casi a su límite y Strauss hizo del vals una danza romántica de fama mundial,

En la capital de Austria, castillos y palacios conviven con los íntimos cafés vieneses, intérpretes de jazz comparten las tablas con cantantes clásicos, la popularidad de las orquestas sinfónicas y filarmónicas no distingue edades ni clases sociales y el teatro es un tema común.