Ningún visitante puede partir de esta tierra sin notar los vestigios que el mundo romano ha dejado en ella. Por ejemplo, la ciudad de Baalbeck-situada 85km al este de Beirut- permite admirar sus templos dedicados a Júpiter, Baco y Venus, construidos entre los siglos I y III a.C.
Este complejo, erigido para el culto, está formado por tres monumentos principales: el santuario de Júpiter, el templo dedicado a Baco y otro, circular, conocido como el templo de Venus; este último transformado en la época bizantina en una iglesia dedicada a Santa Bárbara, patrona de la ciudad.
En este marco arquitectónico se lleva a cabo cada año el prestigioso Festival de Baalbeck, en el que los mejores intérpretes mundiales, de diferentes géneros musicales prestigian, con su arte, a estos lugares, que son significativos trozos de historia.
Frente a la acrópolis se levanta también la Gran Mezquita, construida por la dinastía de los Omeya (siglos VII y VIII) sobre el lugar que antes ocupara el foro romano; allí se emplaza una iglesia bizantina dedicada a San Juan, que posee un minarete cuadrado construido con material que formaba parte de ruinas de otras épocas.
Si quiere verse como un verdadero árabe, compre a los vendedores que se encuentran en las cercanías una abala -túnica típica-y el kaffieh -el pañuelo y el aro que lo sostiene-
Este complejo, erigido para el culto, está formado por tres monumentos principales: el santuario de Júpiter, el templo dedicado a Baco y otro, circular, conocido como el templo de Venus; este último transformado en la época bizantina en una iglesia dedicada a Santa Bárbara, patrona de la ciudad.
En este marco arquitectónico se lleva a cabo cada año el prestigioso Festival de Baalbeck, en el que los mejores intérpretes mundiales, de diferentes géneros musicales prestigian, con su arte, a estos lugares, que son significativos trozos de historia.
Frente a la acrópolis se levanta también la Gran Mezquita, construida por la dinastía de los Omeya (siglos VII y VIII) sobre el lugar que antes ocupara el foro romano; allí se emplaza una iglesia bizantina dedicada a San Juan, que posee un minarete cuadrado construido con material que formaba parte de ruinas de otras épocas.
Si quiere verse como un verdadero árabe, compre a los vendedores que se encuentran en las cercanías una abala -túnica típica-y el kaffieh -el pañuelo y el aro que lo sostiene-