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Guía turística en Kenia

Viajar por Kenia requiere de todas las cosas que uno normalmente lleva cuando parte de viaje . Sin embargo, hay consejos que siempre viene...

miércoles, 16 de marzo de 2011

Guía Turística del Gran Cañón


MÁS POSIBILIDADES
Para quienes no dispongan de tiempo ni estado físico para realizar el recorrido descrito, existe la opción de hacer tramos cortos a pie. Algunos no requieren de guías, como la primera parte del Bright Angel. Muy transitado, con 29 veredas anchas, bellísimo y uno de los menos peligrosos, este trecho se puede realizar sin mayores complicaciones. Otra posibilidad es sobrevolar el Cañón y zonas aledañas -como los volcanes extintos y el Lago Mead- a bordo de un helicóptero. Si se contrata este servicio, se debe considerar un costo aproximado de US$60. Sin embargo, si la elección es la caminata, puede contratar servicios más económicos.

El avistamiento aéreo de este monumental accidente geográfico produce un shock en los pasajeros. El helicóptero se interna en el corazón del territorio indio llamado Hualapai. Hacia el final, la nave planea por el Valle del Fuego y la represa Hoover. Tal vez menos excitante que el vuelo, pero ciertamente más fácil que el trekking, es adentrarse en muía al Cañón.

Estos trayectos, que cuentan con servicios de guía, toman dos o tres días y las reservas deben hacerse con meses de antelación.
Almas aventureras, ecológicas, curiosas y hasta incrédulas se ven conmovidas por la hermosura del Cañón del Colorado. Sobrevolándolo como las águilas desde el cielo, recorriéndolo por los escarpados senderos de las muías o irrumpiendo a pie hasta lo más profundo de sus gargantas de piedra, la aventura encuentra en el Gran Cañón de sus máximos escenarios.

CÓMO LLEGAR:
Generalmente, desde la ciudad Las Vega Los Angeles se puede alquilar un auto o 1 mar un bus. El aeropuerto de Los Ángeles tiene una frecuencia de vuelos intern que conectan con Las Vegas. Por vía terrestre, desde casi cualquier pu to de Estados Unidos, la ruta más directa vía Flagstaff. Este pueblo y Williams tar bien tienen paradas de los conocidos bus de Greyhound Lines. Desde Williams, típii Pueblito del viejo oeste, se puede tomar histórico tren llamado Grand Canyc Railway que llega hasta la margen sur.

ALOJAMIENTO:
Cualquiera sea la categoría del alojamiento, las reservas deben efectuarse con antic pación. Existe una gran variedad d bed and breakfast funcionando mayorití riamente en granjas atendidas por sus due ños. También hay moteles en toda la zoní algunos realmente confortables y de pre dos razonables desde US$40 la noche po persona. Un recomendado: The Eagle' Nest.

MONEDA:Dólar americano.

IDIOMA: Inglés. Es frecuente encontrarse con personas de habla hispana.

martes, 15 de marzo de 2011

La Isla Tortuga


A Tambor latiente en el mar

Recostada sobre el Pacífico, esta playa es un canto a la naturaleza e ideal para descansar a la sombra; muy cerca, isla Tortuga y la población Montezuma son urna tentación irresistible.

Palmeras, hamacas tejidas que la brisa mece apenas, casi 1Okm de playa, algunos tucanes, una candada de cotorras, ardillas y el rumor del Océano Pacífico envuelven a Bahía Ballena. Cae la tarde, y playa Tambor -costa oeste del golfo de Nicoya- es un contraluz dorado. Solo hay que darse al devenir lento de la noche tempranera. Un centro minúsculo de calles de arena convoca a los artesanos que esperan que lleguen los turistas para vender los trabajos en madera.

A pocos pasos de la calle de arena que se abre desde la playa, comienza una picada que lleva a la cascada Montezuma. Hay que "escalar" durante 30 minutos costeando el agua, trepar las piedras y las raíces enormes de los árboles añejos.

Parte del encanto es que no se han construido pasillos para llegar hasta la poza, así es que hay que arremangarse bien los pantalones y calzarse las botas, para que terminen empapadas, pero bien vale la pena. Entre piedras y monte verde, un enorme caudal de agua cae en catarata y estalla contra las blancas piedras. Treinta metros de altura, y una poza de 18 metros de diámetro que refleja el verde de los montes. Es la tercera cascada más grande de Costa Rica.

Costa Rica tiene reputación de ser el oasis de la calma entre sus turbulentos vecinos. Las atracciones naturales del país y su cuidado hacen de este territorio una visita memorable. Los gobiernos sucesivos han hecho un esfuerzo verdadero para preservar la imagen del país como cielo del ecotourismo, haciendo de Costa Rica uno de los mejores espacios para experimentar las zonas tropicales en su estado natural, con todo su esplendor.

lunes, 14 de marzo de 2011

Turismo en Costa Rica - Vida Submarina


Ecológicamente hablando, Costa Rica se encuentra en una situación privilegiada, frente a todo el mundo. En 1970 se estableció un sistema de parques nacionales con el fin de proteger las áreas de vida silvestre y al día de hoy un 28 por ciento de todo el país está conformado por refugios de vida silvestre, reservas biológicas y parques nacionales. La naturaleza se ofrece en toda su pureza original porque la especie humana no ha querido disputarle su reinado.

Vida submarina
La presión en sus oídos se hace más intensa a medida que va descendiendo. Entonces, se llena la boca de aire y hace fuerza para igualar la presión, siguiendo los consejos del instructor. La experiencia en un ámbito desconocido comienza a ser placentera.

El buzo mira a su alrededor y descubre un mundo fantástico y totalmente novedoso: peces de colores intensos y formas variadas circulan lentamente sin tener en cuenta a este intruso de los mares.

Los corales también aportan su impactante belleza.

El buceo deportivo es lo más común en los mares costarricenses, donde se baja a grandes profundidades. Los más audaces realizan inmersiones nocturnas en las que ven otras especies que salen a comer a esa hora, como las langostas y los congrios verdes y dorados, imposible de apreciar durante el día.

La naturaleza dibuja los caprichosos contornos de la piedra cuando se hunde en el mar: cuevas, grietas y túneles que albergan una gran población de peces de infinitos colores, barracudas y tortugas gigantes que conforman una escenografía espectacular para buceadores, o para aquellos menos arriesgados que practican snorkel.

domingo, 13 de marzo de 2011

Viajes a Costa del Caribe


La Costa del Caribe

El reggae resuena en la selva costarricense que avanza hasta ese mar, adonde llegan a zambullirse turistas, mochileros, surfistas y amantes del buceo.

En la costa caribeña se concentra la población negra de antepasados jamaicanos quienes se peinan como los rastas y hablan patuá, un dialecto inglés que incorpora palabras africanas, españolas y francesas. Se mueven con soltura en la selva más húmeda y densa de Costa Rica, y se abanican debajo de las palmeras que crecen a la orilla de las aguas cristalinas.

La música inspira al rítmico andar de los surfistas quienes se dirigen a la playa descalzos, con su pelo rasta y trajes de baño medio caídos. Muchos andan acompañados por mujeres altas y rubias que alguna vez pasaron por la zona, se enamoraron y también terminaron peinadas a lo rasta.

Los alojamientos y restaurantes se extienden por el camino costero que parte de Puerto Viejo hacia el sur y llega hasta el pueblo Manzanillo. Allí se acaban las rutas y empieza la selva. Más allá, el río Sixaola es hogar de caimanes y cocodrilos y, también, la línea natural fronteriza entre Costa Rica y Panamá.

Playas de arenas blancuzcas, miles de cocoteros, un mar de color claro y su barrera de coral son los principales atractivos de una de las áreas más bellas del país: el Parque Nacional Cahuita. Su arrecife se asienta sobre una gran plataforma y se extiende en forma de abanico frente a Punta Cahuita, entre el río Perezoso y Puerto Vargas-, es de tipo marginal, presenta una cresta externa y una especie de laguna interna, y está formado por el ripio de coral viejo, arena al descubierto, parches de coral vivo y praderas submarinas de pasto de tortuga.

sábado, 12 de marzo de 2011

El Gran Cañón - Technicolor


En technicolor
Comenzar la travesía bien temprano y vivenciar el amanecer , es el mejor consejo. En las inmediaciones de las formaciones rocosas, entre sombras y penumbras, aparecen las primeras luces de la mañana. El Cañón se puede sentir, oler y respirar tal cual ha permanecido por millones de años.

Al principio el descenso es relativamente fácil; el entorno parece un gran telón, una ilusión óptica. Los sentidos se confunden tratando, a la vez, de prestar atención a semejante naturaleza y al camino para evitar accidentarse por un mal paso. El aroma a pino, el surrealismo de las vistas, los colores de la tierra y un cielo descomunal hacen una combinación perfecta.

A medida que el día avanza, el calor aumenta llegando a alcanzar temperaturas comprometedoras; sin embargo, frente a tan imponente grandeza, esa molestia es tan solo un pequeño detalle. Deseosos de mostrar lo que es su verdadero orgullo, los guías suelen desviarse de los senderos para revelar, ante el asombro de sus acompañantes, un fósil milenario o algún vestigio de culturas que habitaron el lugar.

Después de un alto en el camino para descansar e ingerir alimentos, el viaje continúa hasta el Jardín Indio, ubicado en una meseta; si el tiempo es suficiente antes del anochecer, se puede continuar descendiendo hasta el río Colorado; de lo contrario, comenzarán los preparativos para acampar en una zona permitida.

La primera noche bajo las estrellas es una sensación "fuerte". El cansancio queda a un lado frente a esa enorme bóveda oscura plagada de lucecitas y el aullido ocasional de algún coyote. Alrededor de un fogón se comparten las últimas vivencias mientras la noche avanza.

Un bálsamo de aguas, de un azul particularmente intenso, es el gran premio del día siguiente. Al llegar al río Colorado parecería que todo cobrara vida de una manera distinta. Un gomón, que fuera acordado antes de partir, aguarda al intrépido grupo para ir en busca de los rápidos. Para navegar en estas balsas no es necesario ser un experto porque quienes manejan son los guías, mientras los pasajeros se dedican a disfrutar. De todas maneras, es indispensable saber nadar y estar atento a las instrucciones ya que, posiblemente, en algún tramo se deba ayudar con un remo.

La combinación de trekking y rafting es perfecta; después de caminar durante un largo día, navegar durante horas entre esas antiquísimas paredes de piedra, es un regalo del cielo. Pero atención: la adrenalina fluye a la misma velocidad que los rápidos, y si bien hay momentos de aguas tranquilas que se aprovechan para algún chapuzón, un picnic en alguna caleta o tomar fotografías, hay otros de gran acción.

Mojados, cansados, pero felices al extremo, se enciende un fogón para esperar el comienzo de un nuevo día que marcará el principio de una nueva aventura: el regreso.

viernes, 11 de marzo de 2011

Turismo en Londres


Londres. Nos preparamos para una caminata y window shopping por Regent Street, Bond Street e inmediaciones londinenses. Ante nuestros asombrados ojos: un completo juego de valijas, astronómicamente caras, en cocodrilo azul, llamadas más para adornar un living que para despacharlas en un aeropuerto, esperando que lleguen intactas a destino.

Tomamos Saville Road, reducto de los grandes sastres; en realidad, para su fama, una deslucida calle que contrasta con la calidad de la ropa que exhibe. La boutique de British Airways está equipada con todo lo que precisa un viajero: libros, guías turísticas y planos. El primer piso lo comparten una moderna cafetería y el mostrador de venta de viajes.

La Casa Central de Sotheby's es otro bastión del Imperio, donde afluye arte de todo el mundo para ser subastado con la tradicional flema británica y la última tecnología.

La galería Burlington Arcade nos lleva a Piccadilly Circus.

Cruzamos Piccadilly directamente a Fortunm & Masón para tomar un delicioso high-tea, y en trascendente meditación deducimos que los ingleses se han dedicado tanto a los desayunos, tés y meriendas que se olvidaron de elaborar almuerzos y cenas. Es hora de descansar, nos espera la noche parisina.

jueves, 10 de marzo de 2011

La Gomera - naturalmente bella


Desde el sur de Tenerife se llega por ferry a La Gomera, luego de haber observado (gratis) el maravilloso espectáculo brindado por los delfines que saltan, juegan y nadan al compás de la embarcación.

Al llegar a esta isla, hay que afinar el oído, ya que muchos de sus habitantes se comunican por medio de silbidos con su propia modulación, volumen y significado. La Gomera, pequeña, se puede recorrer en un día.

Por la noche el paseo se cubre de niebla y el sonido del mar se confunde con el excelente ritmo de Los Sabandeños, el grupo que forman los 29 músicos más populares de las islas, a lo que se suma un menú recitado jocosamente de memoria y en varias lenguas, que llega a la mesa envuelto en carcajadas, provocando la danza sonora de una noche inolvidable.

Donde por la noche desfilan ante nuestros ojos especialidades gastronómicas de todo el mundo. Después de semejante deleite, es recomendable un verdadero pub inglés. Y si todavía no fuera suficiente, se puede terminar la jornada en el muelle disfrutando de la extraña fosforescencia que se produce en el agua, resultado de la comunión entre piedras, arena y luna.

miércoles, 9 de marzo de 2011

El Gran Cañón del Colorado


Cuenta la historia que un río cargado de arena, piedras y barro, en medio de violentos terremotos cortó la tierra como si fuera una gran sierra elevándola hasta el cielo. Cuando los temblores cesaron y la luz volvió a reinar, el mundo pudo apreciar, por primera vez, la grandeza del Gran Cañón del Colorado.

Desafío máximo aun para los más osados deportistas, el Gran Cañón seduce por sus tentadores peligros. Torrentes de adrenalina y satisfacción esperan a los amantes de la aventura en un escenario natural inigualable.

A cada minuto la luz del sol cambia los colores y las formas de los monumentos rocosos, convirtiendo la escena en un espectáculo admirable.

Suele suceder que un paseo de un día por este paraíso tocado por la mano de Dios, sorprenda a tal punto que muchos extienden la experiencia tomando luego alguno de los tours "multidías" que permiten recorrer el Cañón a pie, por río, en muía, en tren o sobrevolándolo en avioneta o helicóptero.

Ubicado al este del estado de Arizona, en la parte oeste de Estados Unidos, el Gran Cañón del Colorado es una enorme grieta en la tierra con más de lóOOm en su parte más profunda, resultado directo de fenómenos naturales -como terremotos, volcanes, y la erosión producida por el agua y el viento- que se suceden desde tiempos inmemoriales.

El río Colorado, el Parque Nacional del Gran Cañón, la zona de recreación del lago Mead y el Parque Nacional Zion conforman un circuito que hace las delicias de los amantes de la naturaleza y del turismo-aventura.

La margen sur del Cañón (South Rim) está abierta todo el año y es la más visitada, concentrando gran parte de los servicios. La margen norte (North Rim) permanece bloqueada por grandes cantidades de nieve en invierno, por lo que está abierta desde mediados de mayo a octubre.

martes, 8 de marzo de 2011

Las Islas Canarias - Tenerife


Sus orígenes se remontan a la antigüedad, cuando en narraciones de fuentes desconocidas se hablaba de unas islas maravillosas, donde se podía disfrutar de una eterna primavera. ¡El Edén! Siete paisajes, siete puertas abiertas, cuya influencia ha conformado una cultura de gente que sabe vivir asimilando lo de afuera sin dejar de responder a su herencia.

Tenerife, la más grande de las siete islas españolas, se presenta como una hermana mayor: coqueta y con un humor muy particular. Así como se le antoja tener un norte verde, fértil, húmedo y tropical, se le ocurre también poseer un sur volcánico, un poco más árido y teñido de ocre. Al mismo tiempo es muy reservada con sus acantilados, casi inaccesibles, impresionantes, ajenos al mundo y al tiempo; y es ostentosa cuando muestra sus brillos en playas bañadas de luz y oro. De noche se viste de gala y recibe a los invitados en sus ciudades llenas de fiesta.

El volcán Teide, monumento natural y el pico más alto de España, se divisa con sus nevadas cumbres desde las templadas aguas de la costa. Los numerosos conos y tubos volcánicos dividen a la isla en dos y marcan una frontera que separa ambos mundos: el norte, beneficiado por la humedad de las nubes que los vientos alisios estrellan en las cumbres, ofrece el paisaje verde y húmedo de La Orotava y La Laguna; el sur, sin embargo, muestra un paisaje desértico, de cielos limpios de nubes y de tierra rojiza. Dos bellezas distintas que demuestran la diversidad insular.

A la hora del chapuzón hay que darse una vuelta por Las Teresitas, donde se encuentran las mejores playas. Las Américas y Los Cristianos son igualmente atractivas, pero muchas veces se llenan de gente; ergo, una buena idea es recibir la noche por estos lados, ya que aquí empieza la "movida". En medio de pubs y pequeñas "discos", una gitana baila en un tablao, tap-tap-tape-tetap y ¡ole!, el público aplaude y pide bis.

Durante el día es recomendable visitar el Loro Parque, en el pintoresco Puerto de la Cruz con excelentes jardines tropicales, que contiene una colección de loros inusualmente grandes, multicolores y gritones, dispersos entre el público. Luego de caminar y caminar entre papagayos, flamencos, tigres y chimpancés, se llega al acuario y de allí a un largo túnel vidriado por donde nadan encima de las cabezas de los visitantes enormes tiburones, mostrando sus afilados dientes.

Para apaciguar los ánimos y contagiarse del espíritu calmo del Mediterráneo, nada mejor que darse una vuelta por los pueblitos Garachico, Icod de los Vinos, La Orotava y La Laguna. La hospitalidad está incorporada al espíritu de los canarios, quienes hablan con un simpático acento, mezcla de español y centroamericano. En estas villas se puede encontrar las mejores artesanías y artículos típicos de las islas, tabernas con parroquianos que trinan en eternas partidas de dominó, callecitas de piedra y faroles que enmarcan románticos paseos por la noche... Quien busque espíritu playero, por aquí no lo encontrará.

lunes, 7 de marzo de 2011

Lanzarote - la isla rara


A Lanzarote se la puede definir como la hermana del medio; no es la más grande ni tampoco la más pequeña, pero sí la más original, como sucede siempre en estos casos. Es un lugar extraordinario y, sobre todas las cosas, visualmente impactante: una isla bien cuidada por muros de piedra pintados de blanconieve y campos cultivados con papas, tomates, cebollas... ¡todo bajo los mismísimos residuos volcánicos!.

Los lanzaroteños se dieron cuenta desde hace mucho tiempo del valor incalculable de su paisaje, y con el sano objetivo de conservarlo, desterraron toda clase de distracciones visuales; por lo tanto, no se ve ningún aparatoso cartel anunciando tal o cual producto ni aburridos postes (los cables se tienden bajo tierra), y no se permite la construcción de edificios altos que ensucien el ambiente.

Las Montañas del Fuego forman un paisaje increíble: el escenario es apocalíptico debido a que los cráteres y la tierra calcinada presentan un aspecto completamente lunar. Los lanzaroteños -nunca se rinden- obtienen cosechas incluso en estas tierras, y los viñedos en el Valle de la Geria florecen al borde mismo de las montañas; el mar de lava alrededor del epicentro de esta región devino el Parque Nacional Timanfaya, nombre del mayor de sus volcanes.

Es interesante detenerse en el Echadero de Camellos y desplazarse en un dócil dromedario por las arenas negras del desierto volcánico. Un poco más adelante se accede al Islote de Hilario, donde en medio de geiseres un restaurante aprovecha las bondades del volcán como horno gigantesco, utilizando el calor que emana de la tierra.

En el norte de Lanzarote se encuentra la Cueva de los Verdes, que se formó hace 5000 años debido a la explosión de gases volcánicos y lava, creando un laberinto de túneles con una extensión de 7km y que en otros tiempos sirvió de refugio a piratas. Se trata de un paseo no apto para claustrofóbicos.

Arrecife y Puerto del Carmen son los principales centros turísticos, con muy buenas playas y acogedores lugares para comer y bailar, muy europeos, donde por la noche los turistas se mezclan con los viejos lobos de mar.

Un dato curioso: en Lanzarote no hay semáforos pero es el reino del peatón, lo que puede dar una idea de los altos parámetros de convivencia que allí se manejan.

No debe perderse bucear por las profundidades del Océano Atlántico dentro de un submarino para asombrarse durante varias leguas de ios cardúmenes multicolores que se acercan para ser saludados a través de las ventanillas.