Entrada destacada

Guía turística en Kenia

Viajar por Kenia requiere de todas las cosas que uno normalmente lleva cuando parte de viaje . Sin embargo, hay consejos que siempre viene...

sábado, 2 de abril de 2011

El Terruño (Uruguay) - Parte 1


El Terruño tiene todos los condimentos para contar una de las historias más ricas de la región. Nacida de la visión de un inmigrante italiano enamorado del Uruguay y sus tradiciones camteras, y alimentada por la imaginación de sus sucesores, que sumaron atracciones como el "túnel del tiempo", o la "Virgen del Turismo", el campo acumula anécdotas que transitan el frágil límite entre la fantasía y la realidad.

Desde tiempos inmemoriales estas casi 360ha han sido lugar de encuentros, como el acontecido el 22 de junio de 1815, cuando el presbítero Dámaso Antonio Larrañaga hace el primer contacto con los indios minuanos. Raederas, puntas de flecha y raspadores testimonian el paso de la tribu por estas comarcas. Y como no podía ser de otra manera, resulta que El Terruño tiene en su haber un genuino altar indígena.

Con la promesa de disfrutar de esta y otras experiencias, acordamos un paseo en carreta luego del almuerzo, tradición muy arraigada en los Raffo desde hace tiempo; de hecho, un cartel del predio lo señala como "La Estancia de las Carretas".

Las instalaciones se dividen en dos: en primer lugar, el casco antiguo que alberga tres dormitorios tradicionales ambientados en el espíritu de principios del siglo pasado y la pulpería La Rueda, el epicentro del lugar.

Un promedio de 40 personas saborean un menú casero que incluye polenta, variedades de pastas, salsas, guiso, parrilla y ensaladas; de postre, pastelitos criollos acompañados de una tisana indígena cuya receta es guardada celosamente por Teresa, un verdadero personaje que lleva más de 20 años en el establecimiento.

La insignia de las carretas está omnipresente: las mesas son ruedas de carruajes apoyadas en una base y las ventanas interiores también reproducen el motivo cilindrico. Dos hermosas estufas a leña dan un ambiente cálido a este recinto que hace las veces de restaurante y estar.

La "segunda parte" se compone del puesto turístico del Mirador Minuano, a escasos 900m del casco principal. Allí es posible alojarse con tranquilidad garantizada: hay solo tres habitaciones y un pequeño lugar para desayunar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario